Referencia: 12294
Ficha técnica
Referencias específicas
UN FOUGÈRE TECNOLÓGICO CON LA FUSIÓN DE CUATRO MATERIAS PRIMAS: SALVIA ENVOLVENTE, NARCISO ELECTRIZANTE, PALO DE ROSA TONIFICANTE Y UNA NOTA METÁLICA Y CÁLIDA, EL ESCLARENO
Un perfume de cuento de hadas, chispeante y cálido. El benjuí suave y avainillado junto a las maderas mezcladas con un acorde de ámbar gris dan vida a un paseo fabuloso entre refrescantes naranjos salvajes. Desde 2004, Eau des Merveilles es una llave que abre el universo de maravillas de Hermès. Entre inocencia y fantasía, sueños de infancia y feminidad. Un mundo en el que lo extraordinario se revela a plena luz del día. Año tras año, los suspiros poéticos nos transportan. Quedan atrapados en un frasco redondeado con efecto de lupa que presume de un poder mágico: el de ver el mundo desde una perspectiva insólita y maravillosa. Es la llave de las maravillas, una fuente de estrellas a plena luz del día.
Un jardín de sombra, agua y luz, cautivador y sensual, donde la higuera se impregna de cortezas de cítricos mediterráneos. «Expresión perfumada de un recuerdo mediterráneo, mosaico de sensaciones olfativas, visuales y táctiles». Jean-Claude Ellena Un relato que explica el espíritu de un jardín mediterráneo, rebosante de árboles y flores, que evoca un mosaico de fragancias robadas en un jardín secreto de Túnez. Como un diario de viaje, este perfume evoca ese universo paradisíaco, de sombras, de agua y de luz, con el tema de una higuera que despierta con la corteza de los cítricos mediterráneos.
En el campo, los niños descubren maravillados los placeres de la naturaleza. Corriendo descalzos por la hierba juegan al Pilla Pilla, (Chat Perché), soplan un diente de león... Y si el gato pasa la pata detrás de su oreja para que llueva, es para que los niños puedan meterse en los charcos y mirar las formas de las nubes.
El eau de cologne: el frescor verde de un gran estallido de naranja con una rúbrica amaderada. Colonia fundadora creada por Françoise Caron en 1979 e inspirada en el olor de un sotobosque húmedo por el rocío matinal, esta fragancia, que se ha impuesto desde entonces como emblema de Hermès, se distingue por la singularidad de su frescor. Perfume relato imaginado como una explosión de notas hespérides donde la naranja interpreta el papel protagonista entre cortezas y hojas, limón, mandarina, menta y brotes de grosellero. Eau d’orange verte desvela toda su complejidad en una estela única compuesta por musgo de roble y pachuli.
